emptyemptyemptyemptytecnologiaemptyemptycienciaemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyeducacion

BANNER

lunes, 9 de septiembre de 2013

LOS “ME GUSTA” DE FACEBOOK ESTIMULAN COMO EL SEXO Y LA DROGA

Los “Me gusta” de Facebook estimulan el cerebro del mismo modo que la droga y el sexo, dice estudio.


                           Adictos al pulgar

Los halagos y gestos de aprobación generan una gran sensación de bienestar, tan grande que procuramos repetir las conductas que las generan y perseverar en la conservación de nuestra reputación.

En el mundo hiperconectado de hoy, las redes sociales son el escenario donde cotidianamente nos exponemos a la aprobación o reprobación de nuestro entorno.

Una de las acciones más frecuentes y directas en ese sentido consiste en dar "Me gusta" en Facebook. Ese pulgar hacia arriba no solo brinda un espaldarazo a una publicación y a su autor, sino que estimula el cerebro de este último de una forma similar a la que lo hacen el sexo o los estupefacientes, según revela un estudio realizado por la Universidad Libre de Berlín.

El trabajo señala que los "likes" de Facebook estimulan una región cerebral conocida como núcleo accumbens, que habitualmente se estimula con el dinero, la comida y el sexo.
"El núcleo accumbens es una pequeña estructura cerebral que integra un sistema llamado ganglios de la base. Es una estructura muy ancestral, que compartimos con muchísimos otros animales. Para usar una metáfora simplificada, es como el tesorero del cerebro", describió Mariano Sigman, director del Laboratorio de Neurociencia Integrativa de la UBA en declaraciones al periódico argentino Perfil

Los voluntarios que recibieron feedback positivo sobre sus publicaciones tuvieron una mayor activación de su núcleo accumbens que cuando veían el feedback positivo que recibían otras personas, demostró el estudio. "Nuestro estudio revela que el procesamiento del reconocimiento social online repercute en el núcleo accumbens. Estos resultados expanden nuestro conocimiento actual del funcionamiento del núcleo y pueden ser relevantes para el desarrollo de futuras investigaciones clínicas y también para el ámbito educativo", dijo Dar Meshi, autor del paper e investigador de la casa de estudios responsable del experimento.

La incógnita que dispara el estudio es si una actividad que genera una activación mayor de esa zona del cerebro puede hacerse adictiva por el placer que genera. Según los expertos, son muchos los estímulos hedónicos distintos (alimento, droga, sexo, risa) que activan el núcleo accumbens. El cerebro está articulado para reforzar aquellos comportamientos que producen esto. "En épocas actuales, donde la disponibilidad de alimentos, de droga o de ciertos placeres hedónicos puede ser casi infinita, estos mecanismos degeneran y se vuelven comportamientos adictivos con la comida, con las drogas, con el sexo y, por supuesto, también con internet", detalló Sigman.

No hay comentarios:

Publicar un comentario